Por Redacción
Integrantes de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Acapulco, Guerrero, reiteraron su desconfianza hacia las autoridades municipales y estatales en materia de seguridad pública y anunciaron la propuesta de integrar un “C-4 empresarial”, conformado por los sistemas de video vigilancia de sus empresas y de particulares.
Durante la reunión convocada para la firma del convenio de colaboración entre la Procuraduría Federal para la Defensa del Contribuidor (Profedeco) y Coparmex-Acapulco que se realizó en el salón Magallanes del Hotel Elcano, se informó que el próximo viernes se convocará a miembros y representantes de otras cámaras y organismos empresariales para fortalecer la propuesta y presentarla a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), para así reunir más cámaras interconectadas e imágenes.
El presidente de la Coparmex, Fidel Serrato Valdés, anunció a sus agremiados que presentaron la propuesta al comandante de la Novena Región Militar, Alejandro Saavedra Hernández, la semana pasada.
Dijo que pidieron que “solamente el Ejército” permanezca en la vigilancia de las cámaras del C-4 del gobierno estatal.
Allí se explicó a los asistentes que el material, como grabaciones o fotografías de zonas donde hayan ocurrido acontecimientos violentos y que cuenten con ellas, podrían ser entregadas a las autoridades. Sin embargo, cuatro de cinco socios Coparmex que pidieron la palabra, se manifestaron contra la entrega de las grabaciones de sus cámaras a las autoridades estatales y municipales.
Incluso se mostraron de acuerdo con que la Sedena mantenga el control de la vigilancia en las cámaras del gobierno estatal.
No obstante, un agremiado deslizó en un comentario sus dudas de la “integridad” del Ejército ante la vigilancia de las cámaras y lo que graban de ellas, pues argumentó que “nadie garantiza que no se sepa quién aporta los videos”, señaló después de que se propuso la entrega de los videos para denunciar homicidios, asaltos o agresiones contra las empresas sus negocios y sus colaboradores.
Un socio destacó la iniciativa de sumarse a la iniciativa porque los sistemas de grabación representarán más recursos para vigilar las calles. Otro orador dijo que “vale más la pena comprar una cámara que un arma”. Un cuarto participante pidió que se solicitara que el Ejército ampliara el plazo para que mantengan la vigilancia del C-4, sin embargo Fidel Serrato indicó que los plazos del general fueron de acuerdo con la temporalidad del Ejército al cuidado de las cámaras de vigilancia.
Se habló de que el “C-4 empresarial” se ha puesto en marcha en otras entidades como Nuevo León y en partes de la Ciudad de México, lo que ha permitido la captura de criminales y delincuentes cuyas víctimas son transeúntes que pasan cerca de sus negocios.
Se discutió sobre la delicadeza de entregar las grabaciones realizadas desde sus negocios a las autoridades porque hablaron de la vulnerabilidad a la que se exponen una vez que se sabe quién entrega material que exhibe a los delincuentes.
FUENTE: SINEMBARGO.MX