Miles de visitantes acudieron este jueves al tradicional Trueque que se realizó en la Plaza de la Concordia de San Pedro Cholula, en la que productores de diversos municipios de Puebla y estados como Morelos, Oaxaca, Guerrero y Veracruz intercambiaron productos de la región por artesanías, ropa, productos de barro, palma y alimentos como frijol, queso, frutas, entre otros.
En un ambiente ancestral, invadido por esencias de mirra, copal e incienso, los paseantes recrearon esta práctica milenaria en la que el dinero pierde su valor entre los comerciantes llegados de localidades como San Nicolás de los Ranchos, Santa María Acuexcomac, San Gregorio Atzompa, Santa Isabel Cholula, Santa María Zacatepec y San Buenaventura Nealtican, así como diversas entidades.
Este rito prehispánico, en el que se intercambian productos de valor por comida, ropa y artesanías entre los pobladores, se enmarca dentro de la 66 Feria de San Pedro Cholula, que es la mayor celebración civil y religiosa que se realiza en este municipio en honor a la Virgen de los Remedios.
El tradicional Trueque de San Pedro Cholula es único en su tipo en México –por su mezcla religiosa y comercial- y forma parte de la veneración ancestral a Quetzalcóatl, uno de los dioses principales de la cultura mesoamericana.
En esta festividad los comerciantes y campesinos traen consigo –como lo hicieron sus antepasados para adorar a la deidad prehispánica–, las cosas que elaboran en su comunidad para intercambiarlo por productos de otros pueblos.
Esta celebración prehispánica también coincide con la veneración a la Virgen de los Remedios en San Pedro Cholula, cuya Parroquia se encuentra en la cúspide de la Gran Pirámide de Cholula y es visitada por miles de personas durante el periodo de la Feria que este año se realiza del 27 de agosto al 26 de septiembre.
Previo al inicio de la jornada, el presidente municipal de San Pedro Cholula, José Juan Espinosa Torres, ofreció café y pan a los comerciantes recién llegados de otras localidades y realizó un breve trueque en el que recibió artículos de cocina, de barro y palma a cambio de porciones de aguacates y limones.