Por Redacción
Ciudad de México.- Según cifras de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, cada año se reportan más de 100 mil accidentes automovilísticos porque el conductor se quedó dormido. Por tal motivo, y para proteger la seguridad del chofer, de sus pasajeros e incluso la carga que transporta, el Departamento de Ingeniería en Sistemas Biomédicos de la Facultad de Ingeniería (FI) de la UNAM trabaja en el denominado “sistema polisonográfico” para detectar el estado de vigilia y alerta.
Livier Báez Rivas, coordinadora operativa de ese Departamento, explicó a la Dirección de Comunicación Social de la UNAM que se trata de un mecanismo que identifica cuando un individuo empieza a ingresar al estado de somnolencia. Así, tiene una alerta de hasta siete segundos antes de caer en estado profundo de sueño.
Algunas de sus ventajas son: puede adaptarse a cualquier automóvil, es seguro, portátil, almacena un histórico de lecturas, cuenta con mediciones instantáneas, no es invasivo y detecta tres señales biológicas (tono muscular, frecuencia cardiaca y temperatura periférica); además, no requiere electroencefalograma.
Por lo general, después de que un sujeto sufre un proceso de estrés viene un relajamiento, acompañado del sueño. Es el caso de los conductores, que se someten a lapsos de tensión al quedar atrapados en medio del tráfico; posteriormente se relajan y corren el peligro de dormirse.
La profesora, que diariamente hace un recorrido de casi dos horas, ha sufrido estos estragos. Fue así que pensó en este dispositivo, que no sólo funciona para los conductores comunes, sino también para los autotransportistas.
En México no existe un dispositivo igual, pero en Australia se desarrolla un sistema que funciona a través de unos lentes, donde se detecta la señal cefálica; sin embargo, las gafas pueden resultar incómodas porque el usuario debe traerlas todo el tiempo, expuso.
En cambio, el “sistema polisonográfico” de la universitaria además de ser cómodo, percibe señales biológicas que cambian con el organismo cuando la persona pierde la conciencia para descansar. De ahí proviene su nombre, poli: muchos.
FUENTE: SINEMBARGO.MX