- De forma simultánea, en tres ubicaciones distintas, los universitarios soltaron globos para enviar un mensaje: la BUAP está comprometida con la equidad de género y la inclusión de todas las personas.
- La campaña comprende actividades académicas y de concientización, para generar espacios libres de violencia.
El primer obstáculo a vencer en la lucha contra la violencia es la dificultad que supone reconocerla, afirmó Mauricio List Reyes, investigador de la BUAP, quien destacó que lo más preocupante del problema es la naturalización, normalización y, en el peor de los casos, la institucionalización de sus manifestaciones. Al presentar el libro Violencia de género en la Universidad, el científico destacó que esa situación imposibilita su denuncia y, por lo tanto, su erradicación. La campaña institucional “Cuenta conmigo” busca visibilizar este problema.
En el lobby de la Biblioteca Central Universitaria, List Reyes, quien es coordinador de la publicación, junto a los otros autores, calificó de preocupante sonreír ante claros actos de violencia como los chistes, pues de esta forma se contribuye a su arraigo. Señaló que la universidad no está exenta de este tipo de actos, los cuales generan situaciones hirientes y ambientes hostiles para el crecimiento de las personas.
La presentación del libro se da en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y forma parte de la campaña “Cuenta conmigo”, que emprendió la BUAP para contribuir a generar ambientes libres de violencia, al interior y exterior de la Institución. Por iniciativa del Rector Alfonso Esparza Ortiz, este programa permeará en distintos ámbitos de la Universidad, al ampliarse los tiempos anunciados.
La iniciativa incluye acciones -actos académicos y de concientización- para promover el respeto a los derechos humanos, a las que se han sumado facultades y dependencias administrativas. En ese sentido, justo al mediodía, grupos de universitarios soltaron globos morados desde tres sitios distintos y de forma simultánea, para enviar un claro mensaje a la sociedad: los universitarios están comprometidos con la equidad de género y la inclusión de todas las personas. Los puntos fueron la Biblioteca Central Universitaria, la Plaza de la Democracia y el Área de la Salud.
Dulce acidito, dramaturgia que revela la violencia en el noviazgo
Además, como parte de las actividades de la campaña institucional “Cuenta conmigo” y para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, celebrado este 25 de noviembre, se presentó la obra de teatro Dulce acidito.
En el auditorio de la Preparatoria Urbana Enrique Cabrera Barroso, a través de la citada dramaturgia se hizo visible el ciclo de la violencia en el noviazgo. En monólogo y de manera amena, los preparatorianos reflejaron situaciones cotidianas que mostraron los diferentes tipos de violencia: verbal, psicológica y física, los cuales se toman como acciones “normales” en una relación de pareja. Sin embargo, son alertas y signos de violencia.
Al término de su presentación, el grupo teatral invitó a los jóvenes a reconocer las etapas de este ciclo, con el fin de evitarlas y pedir ayuda a especialistas en el tema.
La resolución de la violencia en el seno familiar, un tema aún no intervenido
En la segunda conferencia magistral de la Jornada “Conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres”, organizada por el Centro de Estudios de Género, de la Facultad de Filosofía y Letras, Mario Fausto Gómez Lamont, de la Facultad de Estudios Superiores, Iztacala-UNAM, destacó que este fenómeno obedece a estructuras jerárquicas y a roles de comportamiento establecidos culturalmente.
Conceptos como trastornos emocionales, suicidio, feminicidio, violencia escalonada y estructuras jerárquicas, se trataron en la exposición de casos verídicos de violencia familiar, los cuales revelaron que la figura femenina es en la cual recaen, con mayor frecuencia, las distintas manifestaciones de violencia.
En su conferencia titulada “Las consecuencias psicológicas de la violencia familiar en mujeres mexicanas”, Gómez Lamont retomó frases populares como “los trapitos sucios se lavan en casa”, para explicar un fenómeno recurrente que impide la resolución de la violencia, denominado “frontera”, el cual refiere a la imposibilidad de externar las problemáticas acaecidas dentro de la familia, afectando así el estado anímico y psicológico de quien sufre la violencia, y de solucionarlo desde fuera.