• La Máxima Casa de Estudios en Puebla es sede de la reunión de la AMIA y el Grupo Nacional de Instituciones Académicas y Centros de Investigación de la Industria Automotriz.

Dado que la industria no puede absorber las prácticas profesionales de los estudiantes de todas las instituciones, en la BUAP mejoramos el equipamiento de laboratorios y estamos en la búsqueda de estrategias innovadoras para que los alumnos se vinculen con éxito al sector productivo, afirmó María del Carmen Martínez Reyes, vicerrectora de Docencia, durante la reunión entre la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y el Grupo Nacional de Instituciones Académicas y Centros de Investigación de la Industria Automotriz, con sede en la Universidad.

Acompañada de Eduardo Solís Sánchez, presidente ejecutivo de la AMIA, y de Luz del Carmen Gómez Pavón, directora de la Facultad de Ciencias de la Electrónica -donde se imparte la Ingeniería en Sistemas Automotrices-, Martínez Reyes destacó que la BUAP es reconocida como una de las universidades más importantes a nivel nacional, en la formación de recursos humanos en el área de Ingeniería y Tecnología.

“Confiamos en que a través de este grupo se ampliará la vinculación con las empresas del sector, no sólo con la BUAP, sino con otras instituciones de educación superior y logremos integrar proyectos de desarrollo tecnológico desde la madurez del conocimiento, generado por los académicos e investigadores, hasta la atención de las necesidades de la industria, favoreciendo la interacción de las competencias universitarias y empresariales”, sostuvo en dicha reunión realizada en la Galería de Arte del Complejo Cultural Universitario.

Por ello, agradeció la presencia en la BUAP de Solís Sánchez, presidente ejecutivo de la AMIA, representantes de instituciones de educación superior, centros de investigación, corporativos automotrices, empresas de servicios especializados, asociaciones de profesionales y entidades gubernamentales, quienes durante este día discuten en materia de incentivos gubernamentales, proyectos colaborativos, infraestructuras y recursos humanos certificados.

El hecho de que la AMIA participe en este grupo, continuó la vicerrectora, es una señal muy positiva de la confianza que las instituciones de educación superior están generando para establecer vínculos muy provechosos con este sector, un ramo que registra un alto crecimiento y que, por tanto, requiere de recursos humanos altamente capacitados en el desarrollo de innovación tecnológica, en incentivos gubernamentales y en oportunidades de vinculación.

“Nos encontramos ante un escenario muy favorable para identificar nichos de oportunidad que apuntalen la colaboración y nos permitan consolidar a la industria automotriz, no sólo como la más importante de la región, sino una de las más destacadas en México, con fuerte impacto en la economía, la generación de empleos y la mejora en el bienestar de la población”, concluyó.