La Fiscalía General del Estado informa que prevalecen diligencias ante el hallazgo de restos humanos, para determinar si existe vínculo o no, con la desaparición de Lilí Marlén Guevara Hernández. En paralelo, la pareja sentimental de la joven permanece a disposición de las autoridades.
El 05 de julio del año en curso, familiares de Lilí Marlén acudieron a la agencia del Ministerio Público para manifestar que la joven de 27 años de edad, se encontraba desaparecida desde el 02 de julio ya que no había regresado a casa de su progenitora para recoger a sus hijas y tampoco respondía su teléfono móvil.
En atención a la denuncia, la Fiscalía de Puebla activó protocolos de búsqueda y ubicación, girando oficios de colaboración a diversas instancias de seguridad y asistencia, así como a otros estados del país. Inicialmente se planteó la desaparición tanto de Lilí Marlén, como de su pareja sentimental David L.
En el trayecto de la indagatoria, se tuvo conocimiento de que la última persona con la que Guevara Hernández tuvo contacto fue con su pareja sentimental David L., en una fiesta que se realizó en el domicilio de Marlén ubicado en la unidad habitacional Misiones de San Francisco y a partir de ese día la joven desapareció y David L., se mantuvo oculto. Durante inspección ministerial, en uno de los cuartos de la casa en la que se le vio a la pareja por última vez, se halló una mancha hemática y no se ubicó el cobertor de la cama de Marlén.
La Fiscalía boletinó las placas del vehículo Chevy color azul propiedad de la pareja sentimental de Lilí Marlén, y ante una serie de rastreos y diligencias, la Agencia Estatal de Investigación ubicó la unidad en el estacionamiento de Soriana CAPU, se le trasladó al área forense especializada y se le hicieron pruebas periciales, incluida la de Blue Star, que evidenció resultados positivos en hallazgo de indicios hemáticos, así como un dije de Marlén.
Derivado de las investigaciones y búsqueda respecto de diversas cámaras de video vigilancia, se obtuvo el recorrido que habría hecho el vehículo Chevy el día que desapareció Lilí Marlén. Uno de los puntos por donde se ve circular el auto, coincide con la zona del hallazgo de restos óseos debajo de un puente de la zona del periférico ecológico a la altura del fraccionamiento Galaxia La Calera.
Posteriormente se estableció que David L. dejó el vehículo en la zona de la CAPU intentando distraer a la autoridad para plantear la hipótesis de que él habría salido de Puebla hacia otra entidad o país, sin descartar esa hipótesis, también se hizo rastreo de líneas de autobuses y salidas aéreas e incluso se inició el trámite para emitir la alerta roja de Interpol.
Gracias al seguimiento de las indagatorias, David L. fue ubicado por agentes de investigación en un domicilio de Puebla en el que derivado de un cateo se localizaron pertenencias de Lilí Marlén, incluidas una pantalla de plasma, su teléfono celular y el cobertor de su cama. Con el cúmulo de elementos probatorios, el agente del Ministerio Público logró dentro de este mismo caso, que se vinculara a proceso a David L. por los delitos de privación ilegal de la libertad y robo, además de que se estableció que también contaba con antecedentes por violencia familiar en agravio de su anterior pareja.
Los restos humanos hallados en la zona de Periférico Ecológico, se analizan a través de dictámenes periciales como son: de antropología, genética y estomatología, así como trabajo de campo y análisis de la información, para determinar si existe alguna relación con la no localización de Lilí Marlén. Inicialmente los dictámenes de antropología establecen que si corresponden a una persona del sexo femenino.
La Fiscalía de Puebla continúa con el curso de la investigación y se darán a conocer mayores datos conforme la indagatoria lo permita.