CIUDAD DE PUEBLA, Pue. – Con el objetivo de garantizar el acceso equitativo al agua y fortalecer la producción agropecuaria, el Gobierno del Estado de Puebla, encabezado por el gobernador Alejandro Armenta, destinó una inversión histórica de 73.1 millones de pesos al Programa de Apoyo a la Infraestructura Hidrológica. Esta iniciativa, en coordinación con el Gobierno Federal y en sintonía con el Plan Nacional Hídrico 2024-2030, beneficiará a más de 1,500 productoras y productores de 32 municipios poblanos.
Durante la entrega de autorizaciones del programa, el gobernador Armenta destacó que este esfuerzo refleja la visión de humanismo mexicano que promueve la presidenta Claudia Sheinbaum, al poner en el centro a las comunidades rurales y su derecho al agua. “La voluntad de la presidenta se siente en cada dependencia, y CONAGUA es ejemplo de ello”, señaló.
La estrategia contempla 54 proyectos de modernización del riego agrícola, que incluyen tecnificación, entubamiento, rehabilitación de infraestructura hidráulica y uso de energía solar, con el objetivo de enfrentar la sobreexplotación de acuíferos y mejorar el aprovechamiento del recurso hídrico.
En este contexto, Armenta también anunció la instalación de módulos de maquinaria agrícola y centros de seguridad regionales para reforzar las zonas de producción, así como el aprovechamiento de la “cosecha del sol”, a través de paneles solares, para reducir los costos energéticos del campo poblano.
Por su parte, la secretaria de Agricultura estatal, Ana Laura Altamirano, explicó que las obras permitirán rehabilitar y tecnificar alrededor de 2,700 hectáreas, alcanzando una eficiencia en el uso del agua de entre 75% y 95%, mediante la renovación de equipos de bombeo, sistemas solares y mejoras en unidades de riego.
A su vez, la directora local de CONAGUA, Beatriz Torres Trucios, subrayó que esta coordinación entre productores, estado y federación marca el inicio de una nueva etapa de trabajo responsable y corresponsable. “Garantizar el derecho al agua es una prioridad de la presidenta Sheinbaum”, afirmó.
Este programa no solo optimiza el uso del recurso hídrico, también contribuye a fortalecer la soberanía alimentaria, la resiliencia al cambio climático y el desarrollo sostenible del campo poblano. Con estas acciones, Puebla avanza hacia un modelo agrícola justo, moderno y eficiente, alineado con las transformaciones sociales y ecológicas del país.