Por Redacción
Ciudad de México.– En uno de los peores momentos de la economía mexicana, el Gobernador del Banco de México, Agustín Carstens Carstens, presentó su renuncia al Presidente Enrique Peña Nieto para incorporarse como Gerente del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés).
Mediante un correo enviado a los integrantes de la Junta de Gobierno, informó que dejará el cargo en julio de 2017 y asumirá su nuevo puesto a partir del 1 de octubre del próximo año:
“Muy estimados compañeros de Banxico, deseo compartir con ustedes antes de que se haga pública por los medios de comunicación, una noticia muy importante. El día de hoy muy temprano recibí la invitación formal del Consejo de Administración del Banco de Pagos internacionales, para ser su próximo gerente general a partir del primer día de octubre del año próximo.
“Después de meditarlo cuidadosamente, decidí aceptar la invitación, por tanto he presentado al Presidente de la República mi renuncia efectiva a partir del primer día de julio del 2017 como Gobernador del Banco de México”.
Más tarde confirmó su decisión en una conferencia de prensa:
“Tomé esa decisión [renuncia] con sentimientos encontrados. Por una parte, una gran alegría y honor por el reconocimiento que supone para mí, para el Banco de México y para nuestro país. Por otra parte, no me resulta fácil renunciar a seguir en Banxico, la institución a la que debo prácticamente todo lo que soy en mi vida profesional”.
Mencionó que Banxico “está constituido por estupendos colaboradores y su personal está altamente calificado”.
En la sesión de preguntas y respuestas, Agustín Carstens habló de la actual crisis económica por la que atraviesa el país. Aseguró que seguirá trabajando los siete meses que le quedan al frente de Banxico en espera de que “la tormenta no dure tanto”
“Voy a seguir aquí (Banxico) siete meses, espero que la tormenta [económica] no dure tanto”, declaró.
El Secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, confirmó la noticia en el Foro Bloomberg:
“A Carstens le llegó una invitación para irse. Fue por talento y reflejo de una buena gestión frente al Banco de México. Es un reflejo de un buen manejo de las finanzas públicas. Agustín es uno de los mejores. Su decisión genera gusto”.
La decisión es publicada después de que el pasado 23 de noviembre, en la conferencia de prensa donde se entregó el informe del tercer trimestre del año, el Gobernador del Banco de México fue cuestionado ante la posibilidad de dejar su cargo y dirigir el BIS, a lo Carstens respondió: no tengo ningún ofrecimiento de trabajo del BIS por lo tanto no tengo por qué comentar algo que no conozco”.
Agustín Carstens tomó el puesto de Gobernador del Banco de México el pasado 1 de enero de 2010 en sustitución de Guillermo Ortiz Martínez.
El anuncio sucede cuando el peso mexicano ha sufrido una depreciación durante todo el gobierno de Enrique Peña Nieto, desde antes de que siquiera Donald Trump fuera candidato; se da mientras la deuda pública ha crecido a niveles que nunca antes se habían visto: 55.5 por ciento del PIB; cuando la expectativa de crecimiento ha sido recortada por las corredurías, la OCDE o por el mismo Banxico.
Carstens se retira en un momento en el que la inflación ha resentido la disparidad en el tipo de cambio; las tasas de interés se han mantenido al alza y el Presidente electo de Estados Unidos intenta arremeter contra el Tratado de Libre Comercio de Norte América (TLCAN).
El Secretario de Hacienda dijo a la prensa que no es momento de pensar en el proceso de sucesión de Agustín Carstens, el cual será largo. Descartó que la decisión influya en la volatilidad de los mercados, especialmente un golpe contra el peso. Destacó su labor y enfatizó que su cargo en Banxico sigue vigente.
CARSTENS, EL EXPERTO
Agustín Guillermo Carstens es uno de los economistas más brillantes de México. A sus 58 años, con una maestría y un doctorado en Economía por la Universidad de Chicago (1985), inició en 1980 en Banco de México. Fue tesorero internacional del Banxico y representante en las negociaciones de los Bonos Brady de la deuda externa mexicana. Estuvo como jefe de asesores del Gobernador y luego como director general de Investigación Económica. De 1999 a 2000 fue director ejecutivo en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Fue tesorero internacional del Banxico y representante en las negociaciones de los Bonos Brady de la deuda externa mexicana. Estuvo como jefe de asesores del Gobernador y luego como director general de Investigación Económica. De 1999 a 2000 fue director ejecutivo en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Fue posteriormente Subsecretario de Hacienda y Crédito Público en México entre 2000 y 2003, luego regresó al FMI como subdirector gerente y en octubre de 2006 se incorporó al equipo de transición del entonces Presidente electo Felipe Calderón Hinojosa. El 1 de diciembre de 2006 entró como Secretario de Hacienda aunque mantuvo la presidencia del Comité de Desarrollo del FMI y del Banco Mundial. Calderón lo propuso como integrante de la Junta de Gobierno del Banxico y el 28 de diciembre asumió como Gobernador.