“El escenario nacional es una especie de
circo de tres pistas en el cual se embauca
a quien se deje”.
Abel Pérez Rojas
En la política mexicana nada sucede por casualidad. Todo está maquiavélicamente pensado: semejante a una maquinaria de reloj suiza, la importancia de cada uno de los engranes sólo puede entenderse a la luz del funcionamiento del sistema en su conjunto.
De tal manera, un suceso antecede a otro de mayor relevancia, sólo con el paso del tiempo lo “cocinado en lo oscurito” puede verse con claridad, y eso que pretendió ocultarse en un acto circense de varias pistas es bastante claro.
Así son las cosas en México.
Un escándalo tapa a otro, y cuando los ciudadanos, -reducidos a una especie de espectadores de película barata- han agotado su capacidad de asombro, entonces surge algo más llamativo que otra vez nos engatusa, y nos vuelve a maniatar en el mismo sitio.
Todo este show está sucediendo con el caso de algunos ex gobernadores, gobernadores y funcionarios públicos, aunque muy particularmente la atención pública se ha centrado en el caso de Veracruz y su gobernador con licencia Javier Duarte.
Lo de Veracruz es una situación en la cual se ha seguido con especial atención, inclusive por la comunidad internacional, por el monto de lo presuntamente malversado y por los efectos que esto ha ocasionado. Pero tal pareciera que la detención y subsecuente enjuiciamiento está siendo guardado para el momento más oportuno.
Seguramente la “Novela Duarte” encontrará sus clímax intermedios y finales cuando más necesario sea desviar la atención de los ciudadanos ¿Alguien lo duda?
Le recomiendo echarle un vistazo a la publicación de El Universal titulada Cronología. La debacle de Javier Duarte, para confirmar esa impresión de telenovela que da todo este asunto.
Por supuesto que es importante que se investiguen y castiguen todos los casos de corrupción sin importar de quien se trate, pero cada vez queda más clara el uso de “cajas chinas”.
Por ejemplo, funcionó como distractor el ofrecimiento de una recompensa por la captura del veracruzano, la detención de un sujeto con pasaportes falsos a favor de aquél y su esposa, así como la detención y posterior liberación de algunos de sus colaboradores.
Esos temas curiosamente coincidieron con la devaluación del peso producto del “fenómeno Trump”, con la exhibición que sin querer una niña de primaria hizo del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño quien dijo “ler” en lugar de leer (publicado a 8 columnas), con el agravante que se realiza en medio de la reforma educativa la cual ha despertado gran malestar en muchos sectores y, también en el ámbito económico, con el incremento de la tasa de interés de parte del Banco de México (Banxico).
Además de lo anterior, la violencia sigue incontrolable; siguen presentándose más ajusticiamientos y actos de justicia de propia mano, y el llamado “crimen organizado” no para –tan solo el pasado fin de semana aparecieron ocho cuerpos desmembrados en Tixtla, Guerrero-.
Es necesario no perder de vista que después de que pasen los asuntos mediáticos siempre vendrán otros, pero lo verdaderamente importante, como el hecho de refundarnos como país, siempre se deja para después, como si eso no fuera vital. ¿No le parece?
Abel Pérez Rojas (@abelpr5) es escritor y educador permanente. Dirige: Sabersinfin.com